¿Quiénes somos?


No somos los más rápidos, ni los más técnicos, ni los que mejor suben, ni los que mejor bajan, ni los que más kilómetros hacen, ni los que más pulsaciones alcanzan, ni los que mejores bicicletas tienen, ni los que más entrenan, ni los que mejor saltan, ni los que mejor derrapan, ni los que mejores caballitos hacen, ni los que mejor pasan por trialeras, ni los que mejor vadean ríos y arroyos, ni siquiera los que mejor se toman las cañas de después. Somos todo lo contrario, somos diferentes, somos perdedores.

domingo, 14 de junio de 2015

Primer vídeo Perdedores BTT

Las cámaras subjetivas dan mucho juego. Muestra de ello este vídeo que hemos montado los Perdedores juntando trocitos de nuestas últimas salidas en bicicleta.


lunes, 8 de junio de 2015

BiciCoa 2015

Como el año pasado por estas fechas y con el firme propósito de que se convierta en tradición, el pasado 29 de mayo Perdedores BTT celebramos la segunda edición de la BiciCoa (rutita en bici + barbacoa).



El día previo al evento llovió con ganas en los alrededores de Las Navas del Marqués pero el sábado amaneció un excelente día de primavera. Puntuales a la cita, Raúl, Jaime, Susana Jesús, Pablo, Miguel y un servidor nos vestimos de corto para en torno a las diez de la mañana comenzar a dar pedales con la ilusión, en mi caso, de quien lleva meses preparando esta reunión de amigos. No quiero comenzar esta crónica sin señalar que echamos mucho de menos al resto de perdedores que por diversos motivos no nos acompañaron en la ruta. El año que viene habrá otra y cuento, por supuesto, con todos.



Creo sinceramente que en la primera edición de la Bicicoa salió todo bastante bien pero si algo podía mejorarse era el recorrido de la ruta. Esta vez he tenido todo un año para planear una ruta asequible para el nivel de todos los participantes (especialmente el mío puesto que soy el más flojo) y que tuviera de todo un poco: subida, bajada, pista, sendero, paisaje y llaneo para poder echar un rato de charla, puesto que algunos hace meses que no nos vemos.

El track puede descargarse de Wikiloc
 Los caminos que van desde Navalperal de Pinares a Las Navas del Marqués apenas acumulan desnivel y tienen buen rodar. Son una buena opción para calentar las piernas.

Atravesamos el polígono industrial y giramos por la calle central para justo después del punto limpio tomar un camino a la derecha que comienza en suave descenso... hasta que la cosa cambia y nos encontramos con la primera rampa del día. Venimos frescos y el ascenso no nos supone ningún problema. Mantenemos cota sin salirnos del pinar hasta que la pista comienza a descender, momento que Jaime aprovecha para adelantarnos con talento y grabar algunas tomas con su cámara subjetiva que utilizaremos para montar un vídeo que ya compartiremos en el blog.



Como podéis ver en la foto ha montado una horquilla rígida de carbono PRO. Personalmente me encanta la idea y le digo que el siguiente paso será montarse unos frenos V... pero por ahí dudo que pase.
Retomando el hilo de la ruta, tras la bajada revirada y llena de raices y piñas sobre las que Jaime parecía volar atravesamos la M505 para al otro lado tomar otra pista en ligero descenso. De momento parece que la cosa va de llanear y bajar y movemos buenos desarrollos con alegría permitiéndonos el lujo de aprovechar las rocas de los bordes del camino para tirar pequeños saltos de perdedor. Salimos de la pista para tomar un camino que se abre a la derecha. En este giro hay que estar atento porque se ve que es un sendero poco transitado y la vegetación se ha apoderado de él. Apenas veinte o treinta metros de ascenso para perder altitud drásticamente y pasar de los 1.229 a los 1.157 metros en menos de un kilómetro.



Y a partir de aqui... a subir sin parar. Hay que recuperar altitud hasta los casi 1.300 metros de Las Navas del Marqués. Las primeras rampas son las más duras. No sabría deciros el porcentaje, pero las piernas picaban y el corazón se empeñaba en salirse por la boca. Lo normal en estos casos: se pone uno en modo sufridor-cabezón y a dar una pedalada detrás de otra que no hay cuesta que mil años dure.

Y así como quien no quiere la cosa la pista se convirtió en un falso llano constante que si bien tenía un rodar mucho menos agónico exigía lo suyo, así que de vez en cuando había que darle un mordisquito a una barrita y prestar mucha atención a beber agua porque hacía un calor considerable aún bajo la sombra de los pinos.


El primer problema mecánico lo protagonizó el Bombi (Pablo) al encontrarse con la cubierta totalmente desinflada en un corto tramo de bajada que el camino nos regaló en forma de tregua. Nada que no se solucionara en cuestión de minutos... que a mi me sabieron a gloria porque los aproveché para reponer fuerzas. Pero el Bombi abrió la lata y Miguel se llevó el premio gordo. Poco depués de reanudar la marcha él y Jaime se quedaron retrasados dándole aire a la rueda delantera de Miguel, que parecía que perdía.

Una grata sorpresa que pude darles a los perdedores con la colaboración de Susana fue un pequeño abituallamiento al segundo paso por Las Navas del Marqués. Resulta que Susana ha estado lesionada de una rodilla una larga temporada y no ha podido coger el puntito de forma necesario para poder hacer esta ruta con garantía, de manera que la convencí para que nos acompañara los últimos 10 kilómetros y de paso al unirse a la expedición se trajera en el coche una neverita bien provista de bebidas frescas y algo de picoteo que nos vinieron, ciertamente, de lujo.



Tras volver a darle aire a la rueda de Miguel continuamos la ruta bajando por un sendero que corre paralelo a la M505 entre Las Navas del Marqués y el barrio de la estación. A mitad del sendero tuvimos que volver a parar y dos veces más una vez llegamos a la estación por el problema con la rueda de Miguel. Ya sabéis, si habéis leído un poco el blog y/o me conocéis, que suelo ser bastante excéptico con los adelantos técnicos que se aplican a nuestro deporte. Más aún si los departamentos de marketing de las compañías de la industria nos los venden como la solución a todos nuestros problemas... pero no voy a enrollarme con pataletas de abuelo cebolleta. La cuestión es que el tubeless de la rueda delantera de Miguel dijo que de aguantarse el aire dentro nanai y tras varios inflados, una reposición de líquido sellador y un cambio de obús de válvula la única solución fue meter una cámara de las de toda la vida a la rueda.



Solucionado el percance pasamos por debajo de la vía del tren para recorrer el tramo de asfalto que une la estación de Las Navas con la urbanización Ciudad Ducal, nuestro próximo lugar de paso.
Atravesamos esta urbanización de lujo de este a oeste para, pasando por el lago, descender hasta el embalse recorriendo sin duda los parajes más espectaculares de toda la ruta.



Pero toca volver a recuperar cota. En los últimos 3 Km de ruta ascendemos unos 150 metros, pero cada uno a su ritmo superemos la dificultad sin demasiados problemas. Más aún sabiendo que se trataba del último esfuerzo y que la recompensa sería una bebida fresquita bien merecida.



Unos 32 kilómetros de divertida ruta con casi 700 metros de desnivel acumulado dejan el listón alto para el año que viene. Tendré que comenzar pronto a explorar nuevos recorridos para la edición del año que viene.


Y por supuesto, agradecer a los familiares y amigos que hicieron posible que cuando llegamos pudieramos disfrutar de una buena barbacoa.







El año que viene repetiremos. ¡Os espero a todos!