¿Quiénes somos?


No somos los más rápidos, ni los más técnicos, ni los que mejor suben, ni los que mejor bajan, ni los que más kilómetros hacen, ni los que más pulsaciones alcanzan, ni los que mejores bicicletas tienen, ni los que más entrenan, ni los que mejor saltan, ni los que mejor derrapan, ni los que mejores caballitos hacen, ni los que mejor pasan por trialeras, ni los que mejor vadean ríos y arroyos, ni siquiera los que mejor se toman las cañas de después. Somos todo lo contrario, somos diferentes, somos perdedores.

jueves, 22 de enero de 2015

BTT en la nieve - Subida al Berezo - 22/01/2015


Algo tendrá salir a montar en bicicleta por la montaña cuando hay nieve porque a muchísima gente le encanta. No tengo el gusto de haber probado esta experiencia, lo confieso, pero Jaime ya la ha tachado de su lista de "cosas pendientes".

La crónica de la ruta directamente copiada de wikiloc:
http://www.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8708274

"La mañana no animaba a coger la bicicleta, pero me apetecía, había niebla y hacía frio, la última semana habían bajado las temperaturas más de la cuenta. Pero aún así, me abrigué y a pedalear. La idea era llegar a pisar nieve, parecía alta, pero tenía ganas de hacerlo. Comencé la subida, los dos kilómetros y medio iniciales son temerosos, pendientes de más del 10 % de forma continuada, cuando quedaban menos de medio kilómetro para terminar este ascenso pude ver a lo lejos a otros dos ciclistas que también se habían atrevido a iniciar el ascenso, en ese momento deseaba alcanzarlos, la subida en solitario es bastante monótona. Gracias a la suerte y a elevar un poco el ritmo 10 minutos después los había cogido, como digo, la suerte me había ayudado, habían recibido una llamada telefónica. Comencé a hablar con ellos y continuamos ascendiendo, los compañeros eran de Navalmoral de la Mata (Emilio y Daniel). Antes de llegar a la Kikla comenzamos a ver los primeros signos de nieve, y nada más pasar esta, en la umbría, la nieve nos rodeó. Seguimos ascendiendo, esta ruta es lo único que tiene, y cuando nos quedaba menos de un kilómetro para la meta, Emilio y sus cubiertas tubeless comenzaron a soltar aire, no hubo arreglo posible, el líquido estaba helado y muy ligero, así que hubo que poner una cámara y continuar. Justo antes de llegar al Berezo, la nieve hizo acto de presencia, comenzaron a caer copos y un aire endemoniado que nos frenaba en exceso, pero ya estábamos ahí, 1000 metros de ascenso en menos de 13 kilómetros, sin descanso. Que gusto da pisar nieve con una bicicleta de Montaña"

Os dejo las fotos y los datos de la ruta.















El Track puede descargarse de Wikiloc

miércoles, 21 de enero de 2015

Centrador de ruedas casero

Cuando el tiempo y los resfriados no acompañan para salir a montar en bicicleta paso el rato trasteando en el taller. En esta ocasión he fabricado un centrador de ruedas casero que si bien no ofrece la precisión de uno comercial de uso profesional me facilitará la tarea de centrado cuando sea necesario.

Compré un listón de pino en Leroy Merlín y recuperé un recorte de aglomerado que tenía por casa después de desmontar un mueble de cocina. Corté los listones a la medida adecuada y usé unas escuadras para colocarlos verticalmente midiendo bien con metro y nivel para que quedaran bien enfrentados. Utilicé una varilla roscada de 5mm. para atravesar el eje de la rueda y unas palomillas para centrarla.


Un viejo gorila y partes de un freno cantilever viejo me sirvieron para fabricar la pieza que me indicará por qué lado está desalineada la llanta. la fijé a la tabla de la base con tirafondos sobre una pequeña plataforma a la que va unido el gorila con un par de escuadras más pequeñas. Todo ello midiendo bien para que esta pieza quedara centrada respecto a las patas verticales.


Siempre que le he metido mano a una rueda con la idea de centrarla he acabado llevándola al taller porque he provocado mayor estropicio del que la rueda tenía. Espero que con ayuda de este útil no me vuelva a pasar (sé con toda seguridad que me volverá a pasar... lo sé).


lunes, 5 de enero de 2015

Ilustres perdedores: Sergio

Si con alguien me gusta salir a montar en bicicleta es con Sergio (Lude) porque entendemos este deporte de la misma manera... y a la vez de forma completamente diferente. Si bien yo soy mucho más tiquismiquis con el material y siempre ando mirando qué pieza cambiar para rebajar unos pocos gramos Sergio mantiene su bicicleta de serie, tal y como salió de la tienda, salvo por los cambios que haya tenido que hacer a causa del desgaste derivado del uso de los mismos. Si bien yo soy, lo reconozco, un poco marquista, Sergio busca la funcionalidad en todas sus compras. Criterio mucho más acertado que el mío, lo reconozco.


Ahora bien, cuando nos dejamos de "ciclismo de tiendas" y salimos a montar de verdad, es el mejor compañero de ruta. Cuando hay que subir se sube y cuando hay que bajar se baja pero siempre con el propósito de disfrutar del recorrido sin importar lo que diga el cuentakilómetros, como a mi me gusta.


No verás en Wikiloc una ruta compartida por Sergio... dudo que tenga usuario, de hecho. Aunque sí ha ideado buenos recorridos para rutas de varios días, que es una de sus grandes pasiones. Pocas veces le he visto más emocionado como cuando habla de las rutas de alforjas que ha hecho con otros perdedores por las provincias de Cuenca o Teruel.


Actualmente Sergio tiene asuntos mucho más importantes que atender y la frecuencia con la que coge la bicicleta ha disminuido considerablemente. De hecho me sorprende que con lo poco que monta sea capaz de mantener el ritmo a base de pundonor. Seguiremos saliendo a hacer rutas por muchos años más. Yo habré cambiado de bici tres o cuatro veces en unos cuantos años y él mantendrá la suya aún con la reparación provisional del freno que tan buen resultado dio (¿para qué poner un pasador en las pastillas de freno si la horquilla del pelo que pusimos para salir del paso funciona perfectamente?) pero lo que es seguro es que disfrutaremos de la ruta como nos gusta: rodando en paralelo siempre que el camino lo permita y charlando de nuestras cosas sin mirar el cuentakilómetros.